Escribe Danilo Sánchez Lihón
1. Dulzura por dulzura corazona.
Cayó y rodó por las gradas de cemento de la escalera de su departamento, en el quinto piso del edificio donde vivía, en la cuadra 52 de la Av. Arequipa. El golpe le ocasionó una lesión cerebro vascular de la cual no se recuperó jamás.
Tres horas estuvo inconsciente tirada en la losa sin que nadie pudiera auxiliarla. Y es que vivía sola.
Era la esposa –lo es– del poeta más estremecedor, audaz y rotundo de los últimos siglos de la poesía universal, quien escribió para ella.... Leer Más